Papá desesperado pide internación domiciliaria para su bebé
Cristián es padre de un pequeño de 6 meses que ingresó a los pocos días de vida al hospital con una bronquiolitis, se contagió enfermedades intrahospitalarias y su estado de salud es muy delicado. “Ya no va a ser el niño normal que era cuando llegó,” lamentó.
Solidaridad09/11/2018Mirko tiene tan solo 6 meses de vida y le toca luchar contra varias enfermedades. Hoy se encuentra internado en el hospital Público Materno Infantil y los médicos recomiendan que pueda seguir con su tratamiento en su domicilio, sin embargo, sus papás no cuentan con los medios suficientes para poder hacerlo.
Cristián Cocilobo, su padre, contó a Canal 11 que ingresó al nosocomio cuando tenía 28 días de vida por un cuadro de bronquiolitis y mientras le realizaban controles en Neonatología se contagió de influenza y neumonía.
“Le tuvieron que poner un respirador mecánico. Cuando evoluciona, por una negligencia, una mala praxis de una alimentación se broncoaspira. Digo negligencia porque por ley nunca hay que alimentar a un neonato apenas se hace el destete del respirador. Lo descuidan, en las cámaras se ve que la persona que estaba a cargo de él, una enfermera, estaba de espalda. Otra enfermera entra y ya lo encuentra todo vomitado y sin pulso,” dijo.
Todo ello desencadenó en que hoy padezca una encefalopatía crónica y un retraso madurativo global, una discapacidad bastante severa. “Ya no va a ser el nene normal que era cuando llegó al hospital," lamentó
“Los últimos 30 días estuvo con contagio de enfermedades. Me sugirieron la internación domiciliaria porque si sigue acá se va a seguir contagiando, debido a la debilidad que él tiene en su fisonomía corporal, me sugieren eso. Él va a ser oxígeno dependiente toda su vida, hoy en día tiene un aspirador continuo porque no traga, no deglute, lamentablemente estamos en una situación bastante complicada,” indicó.
Finalmente, expresó que junto a su esposa decidieron dar a conocer su situación apelando a la buena decisión de quienes pueden otorgarles una vivienda adecuada donde su pequeño pueda seguir con su tratamiento. “Es una desesperación de seguir viendo que mi hijo no puede salir adelante estando en el hospital. Necesito un lugar si o si y necesito volver a trabajar para mantener a la familia,” finalizó.