La fiscal de la causa por el manejo económico del convento dejó la investigación

La fiscal que intervenía en la causa “Virgen del Cerro”, la cual investigaba un presunto fraude económico en la relación entre el convento San Bernardo y la congregación que venera a la imagen de la Virgen no reconocida por la Iglesia Católica, decidió apartarse del caso por aparentes maltratos y agravios.

Según la información que compartió Telefé Salta, en base a lo difundido por el diario La Nación, la fiscal en cuestión es Ana Inés Salinas Odorisio, a cargo de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, quien tenía participación en la causa que investiga la gestión económica del convento y la fundación “Obra Yo soy la Inmaculada Madre del Divino Corazón Eucarístico de Jesús” y “Yo soy el Sacratísimo Corazón Eucarístico de Jesús”.

Cargnello autorizó la celebración de la misa en el Santuario de la Virgen del Cerro

En cuanto a los argumentos por los que la fiscal decidió dar un paso al costado, señaló que en el encuentro que mantuvo con la priora del convento, fue “reiteradamente cuestionada” en su labor “investigativa” por “falta de objetividad y lealtad procesal” por parte de los abogados representantes de las religiosas, en base a lo publicado por el medio nacional.

“Utilizaron términos agresivos e irrespetuosos (…) inapropiados en mi condición de Magistrada y, principalmente, de mujer”

“En efecto, los letrados mencionados no dudaron en utilizar palabras ofensivas no solo para fundar la supuesta falta de objetivas (Sic), sino también para ofenderme en mi persona, generando ello un conflicto emocional para seguir interviniendo en las presentes actuaciones”, dice el escrito al que La Nación accedió.

Con respecto a la actitud de uno de los abogados, la fiscal dijo que su comportamiento fue “violento y ofensivo hacia mi persona, me genera violencia emocional para seguir interviniendo” en el caso.

Vale mencionar que la visita de Salinas Odorisio al convento fue casi a fines de noviembre, a raíz de una causa por presunto fraude económico, que se desprendió de la denuncia que las carmelitas radicaron contra el arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello, y que continuó tras el acuerdo firmado tiempo atrás entre las partes.