Robos en el centro: la policía sospecha de una banda foránea

La policía, por ahora, sólo cuenta con una cámara de video que llegó a filmar la silueta de uno de los delincuentes. Se trata de un dispositivo que se hallaba en una playa de estacionamiento, ubicada al lado de la galería. En esta grabación se advierte la presencia de un hombre que ingresa después que el último empleado cierra el portón de dicha guardería.

La escena, según explicaron los investigadores a Informatesalta, muestra la figura de un hombre que ingresa, y en seguida enciende una linterna, tras lo cual comienza a recorrer la playa y a anular las cámaras, girándolas para arriba para que de esa manera neutralizar la filmación.

Pese a ello, la policía confía en las imágenes que pudieron grabar dos domos claves del Centro de Video Vigilancia, uno de ellos ubicados en calle Belgrano y Mitre. Se cree que estas cámaras podrían haber filmado a los ladrones, cuando huyeron de la galería.

Por otra parte, los investigadores esperan también imágenes de otras cámaras pertenecientes a dos bancos privados, Macro y Más Ventas. Asimismo, no se descarta que otros comercios puedan sumar más luz a partir de dispositivos propios de filmación externa.

Los ladrones irrumpieron en varios de los locales, incluida una confitería, Los Angelitos, de donde se robaron la mayor suma de dinero, 500 mil pesos y 12 mil dólares. Como así también, se llevaron el disco rígido que contenía las imágenes recogidas por seis cámaras de video internas, las que filmaron a los delincuentes.

Para acceder a los distintos locales, los ladrones rompieron las cerraduras de las puertas, tanto en las oficinas internas como en los locales comerciales, mientras que en el caso de la confitería, al parecer, los ladrones habrían entrado por el conducto de ventilación.

 Sólo hipótesis

 Para los investigadores, de los robos en la galería participaron, al menos, tres sujetos o más, quienes utilizaron guantes del tipo de jardinería, ya que se hallaron huellas en los distintos locales que fueron saqueados.

De la charla con los afectados, surgieron indicios de posibles sospechosos, entre ellos un ex empleado que trabajaron en la galería. Se trata de un hombre que, además de conocer el movimiento interno de las oficinas, habría estado implicado en faltante de dinero.

La policía no descarta que este sujeto u otras que también se desempeñan como empleados en los locales, hayan tenido una participación indirecta. “Es posible que algunos hayan aportado los datos necesarios para que el atraco lo cometan otros cómplices”, explicó uno de los investigadores.

En tal sentido, los policías no descartaron que los robos hayan sido obra de delincuentes de mayor peso o experiencia. “Podrían tratarse de asaltantes cordobeses o rosarinos, ladrones desconocidos y con mayor bagaje en la materia”, agregaron.